miércoles, 21 de septiembre de 2011

El Lek (zona de juego).

La palabra lek es una palabra que deriva del sueco y significa juego. Es el territorio donde los machos se exhiben para atraer a las hembras. Estos leks han sido estudiados por zoólogos y etólogos durante décadas. En los rituales humanos también se observan estas zonas de juego, un lugar por excelencia catalogado como lek, es la discoteca. Ya en la adolescencia humana podemos observar comportamientos característicos, pues es en esta época donde las hormonas recorren el cuerpo de forma más evidente y voluptuosa, provocando que los jóvenes se junten en plazas y parques y actúen de forma característica, exhibiéndose, gritando, haciendo alardes de fuerza y en definitiva haciéndose notar y provocando que las jóvenes les miren, mientras estas aparecen sentadas tranquilas y observadoras. Esa imagen pictórica y llamativa es un autentico lek, una zona de juego, de exhibición, de conquista, de dejarse ver y en definitiva una zona de poder y dominio. Porque un lek es un lugar donde hay dominantes y dominados, los dominantes en la especie animal se denominan machos alfa, son los fuertes o los más hábiles, los más llamativos o los que mejor cantan, según a la especie animal a la que nos refiramos. En los humanos, es en la adolescencia la época que mejor queda representado el lek. Para los adultos, este proceso es más sereno y requiere de otros espacios mejor definidos, como una discoteca. La discoteca es una zona de juego por excelencia, esto es tan así que incluso las personas que no quieren jugar, por el hecho de formar parte de ese entorno ya están jugando consciente o inconscientemente. La única forma de no participar es no entrando en la discoteca. Para algunas personas saber conscientemente que una discoteca es una zona de juego, les puede deprimir, enfadar e incluso crearles frustración, llegando a pensar que los hombres son simples y burdos y las mujeres malas y arpías, dado que al entrar a la discoteca forman parte de un juego al que no quieren participar, pero es una realidad, si entras estas en el juego, eso se debe asumir, para evitar frustraciones y malos estados de ánimo. Pues incluso siendo consciente de que no se va a participar, ya es una manera de entrar y participar en el juego. Un ejemplo seria un chico que decide entrar en una discoteca con la intención única de tomar una cerveza, se sienta, no mira a nadie, esta relajado y en ese momento entra una chica que cansada de lo que se cuece siempre en las discotecas decide que también está harta dejugar, no quiere más moscardones, solamente tomarse un cubata . Ambos están cerca, relajados, sin ganas de conocer a nadie, sin querer participar, pues en el momento en el que sus miradas se crucen, sin ninguna otra intención que el mero conocimiento de quien tienen al lado, en ese instante están más que dentro del juego, están jugando. No se puede evitar el juego, por mucho que uno quiera huir de él, la única forma es no entrar. Incluso cuando yo mismo decido que no quiero entrar en el juego se que de una manera u otra estoy jugando a no jugar, por el hecho de que mi sola presencia provoca cambios en los demás. Provoca miradas, pensamientos, gestos. No deseo jugar pero los demás ya me han incluido en el juego, pues estoy dentro.

Y como todo juego tiene sus reglas. La regla básica es que es una competición, una lucha no salvaje, un hacerse notar por encima de los demás. Quien no entienda esta regla, no sabe jugar, se frustra al ver a otros pisarles objetiva o subjetivamente, consciente o inconscientemente, suave o bruscamente, se enfada cuando después de unos minutos u horas de conversar con una chica, llega un chico y en cinco minutos se eleva por encima de los demás y es elegido como la mejor opción del momento. Una discoteca es un lek, un lek es un juego de exhibición, poder y dominancia, un terreno llamado a la lucha intelectual y emocional por la conquista.

Mucha gente al hacerle consciente de que una discoteca es un lek, suelen enfadarse, suelen verlo machista, escandaloso, animal, pueril, retrogrado e incluso enfermizo. No son conscientes de que el ser humano es un animal territorial que busca pareja a través de la muestra de lo que es y de lo que puede conseguir. Estas personas no quieren oír hablar de la comparación del hombre con el animal, son dos conceptos que no les casan, que no deben ir juntos. Piensan en la superioridad del ser humano, piensan erróneamente.

Los hombres se exhiben a las mujeres, con su físico, su intelecto, su inteligencia emocional, las mujeres se exhiben también y a la vez eligen, si les apetece, al mejor postor que se encuentre disponible en aquel momento. Nos seducimos mutuamente con miradas, con gestos, abrazos y palabras. Es un juego con reglas casi siempre implícitas, excitantes, llamativas y duras. No es apto para los que no saben perder, para los que se frustran con facilidad, para los débiles emocionales. Se debe aceptar el juego y dejarse fluir por él como una gota más de un inmenso rio de sensaciones, neurotransmisores, de juegos no verbales y verbales, un juego de seducción, dominancia y sobre todo de autoestima.

DELIRIOS Y LOCURA

DELIRIOS Y LOCURA

Delirios y otros problemas

Bienllegados a la pagina donde todos vuestros delirios serán recompensados con miradas de incomprensión y rechazo amable.
Nos movemos incesantemente por sendas incautas, ataques de locura anonimos y vulgaridades encendidas por el alcohol de cualquier cantina.
No vengo a vender nada de valor ni a regalar una sonrisa verdadera, vengo para quedarme sentado mientras tu disfrutas de la ignorancia de los demás.
Vengo para quedarme sentado entre tus historias de a media tarde, para escucharlas, leerlas y enmudecer al ver que todos somos tan parecidos, tan complejamente simples.....
Me siento y te escucho. Sientate y escuchate. Sentemonos a escucharnos.Escuchame si puedes.